Como todo en la vida hay dos formas de realizar las cosas: Bien y mal.
Yo siempre he pensado que hacerlas bien desde el principio nos ahorra tiempo, nos aporta más valor y además obtenemos mejores resultados.
De cara al posicionamiento de una web ocurre lo mismo, existen muchas maneras de optimizar una web para el SEO, sin embargo, no todas serán igual de eficaces. De hecho, una optimización mal hecha causa más daño que beneficio.
¿Qué es una auditoría SEO?
Una auditoría SEO implica un proceso de análisis del estado de un sitio web para poder identificar las áreas de mejora de cara al posicionamiento. Este proceso puede realizarse contratando a un experto para que realice una auditoría completa de la web o puedes auditar la web tú mismo siguiendo unos pasos que te ayuden de guía.
¿Por qué es importante una auditoría SEO?
Una auditoría SEO es el primer paso para mejorar el posicionamiento de una web, ayudando a identificar las áreas de mejora y a elaborar una nueva estrategia con la que implementar esos cambios oportunos.
Sigue estos pasos para analizar uno a uno cada elemento y mejorar el posicionamiento de tu sitio web para comenzar a ganar VISIBILIDAD y CLIENTES.
Paso 1: Auditar la estrategia de posicionamiento actual y el contenido
La optimización para el posicionamiento SEO es clave para indicar a los motores de búsqueda de que trata la web, el contenido que hay en ella y que aportas al usuario. Una web optimizada será comprensible para Google y podrá mostrarla en sus resultados de búsqueda, ganando posiciones con las palabras clave correspondientes.
Los ítems que no pueden pasarse por alto en una auditoría son:
- Título y Meta Description: Clave para que Google categorice la web, y sobre todo que el usuario, entienda y sepa que se va a encontrar.
Con el N.º de caracteres adecuados y diseñados ambos para que aporten información y llamen la atención sobre el resto de los resultados de búsqueda.
- Revisar la vista previa SERP: Revisar como aparece la web en los resultados de búsqueda actualmente. Aunque este resultado es orientativo, porque Google modifica frecuentemente esta información en base a lo que entiende que esa web proporciona y lo que el usuario está buscando.
- Estrategia de palabras clave: Uno de los elementos más importantes de una estrategia SEO es identificar las palabras clave que buscan los usuarios. Esto ayuda a comprender que interesa y que busca su cliente y satisfacer mejor sus necesidades.
Estas palabras deben de establecerse para cada URL de la web, no solo para la página principal o home.
Existen muchas herramientas para realizar una investigación de palabras clave, como el planificador de palabras clave de Google, totalmente gratuito. Aunque lo ideal es una investigación exhaustiva y mucho más amplia.
- Análisis del contenido: El volumen del contenido creado debe ser interpretado por Google como óptimo. Una web con contenido insuficiente no aporta valor ni mejora la experiencia del usuario, con lo que su posicionamiento se verá negativamente afectado.
El contenido debe de ser útil, atractivo y real, no un plagio ni un copia y pega rápido (Aquí vimos que a Google no se le puede engañar).
El contenido que existe debe de estar asociado a la estrategia de palabras clave anterior y resolver las intenciones de búsqueda de los usuarios.
Además si cuentas con un Blog o redes sociales dónde publicas contenido, la publicación regular de nuevos contenidos es otro aspecto importante de una estrategia SEO.
- Calidad y optimización de imágenes: Las imágenes deben de estar optimizadas, adaptadas al contenido y las etiquetas Alt completas.
Paso 2: Auditar la experiencia del usuario
- Velocidad de carga: La velocidad de carga es un factor crítico de clasificación para el SEO al ser un indicador importante de la experiencia del usuario. Si la web tarda más de 4 segundos en cargar lo más probable es que el usuario la cierre y vaya a la siguiente.
Los elementos que influyen en la velocidad de carga son muchos, desde el servidor contratado, la plantilla web y los plug-in instalados, el peso de las imágenes…
Para comprobar la velocidad de su web existen herramientas en línea muy fáciles de usar.
- Web intuitiva y sencilla: La web tiene que resultar fácil y clara: Es decir, si para solucionar una duda el usuario debe de navegar por dentro de la web a traves de varias páginas… ERROR. El contenido debe de ser accesible y sencillo de encontrar, intuitivo para el usuario.
Paso 3: Auditar el sitio web
- Resultados de indexación: Analizar la indexación del sitio web en Google, es decir, si el robot de Google puede acceder a las diferentes URLs de la web.
- Análisis de errores: Comprobar una a una todas las URLs del sitio web en búsqueda de errores. Una web que arroja un error, como por ejemplo, un error 404, que haya dejado de existir o que el contenido ya no carga adecuadamente, daña la experiencia del usuario, Google le resta posiciones y lo más importante, ese posible cliente cerrará la página y accederá a otra web para resolver su duda o necesidad.
- Redirección HTTPS: Web con versión HTTPS.
- Número de enlaces o backlinks que apuntan a la web: Un determinado (nunca excesivo) uso de enlaces hacia la web en cuestión es sinónimo de calidad, relevancia y potencial. De esta forma Google entiende la autoridad de la página y afecta positivamente al posicionamiento.
- Responsive: La optimización móvil es crucial hoy en día, teniendo en cuenta el porcentaje creciente del tráfico web que procede de dispositivos móviles.
- Seguridad del sitio: Google ha convertido la seguridad del sitio web en un factor de posicionamiento muy importante, puesto que es indicador de la confianza y la seguridad de los usuarios.
Independientemente de la forma en que decida auditar su sitio, si por su cuenta o a través de un profesional, es un proceso esencial para cualquier web que quiera mejorar.
Después de realizar una auditoría efectiva su web se benefiiará ,SI O SI, de mejoras en el posicionamiento.
Gracias por leerme.
Andrea